Juntos es mejor

"Vuelve, y vuélvete a reír mientras bailamos"

No puedo ser yo sin ti. Hay personas que nos completan, cierran el círculo, te hacen la vida fácil. Entran en tu vida para hacerla mas sencilla, mas tuya, mas nuestra. Hay personas que son imprescindibles. 

Dicen que la felicidad no está al lado de alguien, sino dentro de uno. No me lo creo, estamos hechos para compartir, para querernos, para hacer de dos personas un solo cuerpo. Todo es mucho mejor cuando lo compartes, es mejor ir al cine en pareja, es mejor ir a cenar dos que uno, es mejor dormir acompañado, es mejor juntos. Es mejor ahora. 

The good side

Creo que a veces nos olvidamos de quienes somos. 

Hoy he leído mucho, y me he dado cuenta de que el mundo es bueno, está lleno de cosas buenas, de gente que se supera cada día, que es capaz de ver solo el lado bueno de las cosas. Un ejemplo es Carlos Matallanas. Es un chico que sufre la enfermedad del ELA y que ha escrito sobre ella después de ver la película "La teoría del todo" que cuenta la historia real de Stephen Hawking, el famoso científico y astrofísico, y su primera mujer Jane Wilde. Podéis leer su blog aquí . Es emocionante.  

Hay historias que nos hacen sentirnos más pequeños, parece que a veces no damos lo suficiente. Creemos que por naturaleza la gente es mala, hemos perdido la confianza en el ser humano. Hemos perdido las ganas de dar una oportunidad, cuando hay millones de personas a nuestro alrededor que se merecen una 2ª y, en ocasiones, una 3ª. No debemos olvidarnos que somos humanos, que todo es un círculo y que si hacemos algo bueno hoy seguro que mañana se nos compensará con otra cosa. Es el "hoy por ti y mañana por mí". He visto un vídeo, que muestra en qué gasta el dinero un hombre sin techo, no sé si esta guionizado, pero personalmente me ha parecido bastante representativo de los prejuicios que tenemos en muchas ocasiones. Os dejo el enlace - Vídeo. 

He leído, he visto y he escuchado noticias buenas esta semana, noticias esperanzadoras y es que quizás, no todo es tan negro como lo pintan. Vivimos en un mundo injusto, un mundo injusto por naturaleza, en el que los ricos tienen poder a causa de la pobreza de otros, en el que hay armas nucleares, guerras, violencia, abusos, asesinatos, violaciones, etc. Pero no debemos olvidarnos que ese mismo mundo se ha descubierto una vacuna experimental contra el ébola que ha llegado a África Occidental y que puede salvar miles de vidas. 

Las personas recobran la confianza y el interés en la cultura, y un ejemplo es el aumento de visitas a los museos estatales del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Por otro lado, los hermanos Gasol hacen historia, elevan el deporte español al entrar en los quintetos titulares del All Star Game que se disputará en Nueva York el 15 de febrero. 

Carmen, la anciana que fue desahuciada hace unas semanas en Vallecas, a la que el Rayo Vallecano ayudó con 21.000 €. Ha decido ceder la mitad de ese dinero a Wilfred Agbonavbare, un ex portero del equipo ingresado en un hospital en estado crítico. Con ese dinero el guardameta podrá cumplir su última voluntad, ver a sus hijos después de diez años. Podrán viajar desde Nigeria a España para acompañarle en la enfermedad. 

Estamos hechos de sentimientos, tenemos el poder de hacer feliz a la gente de nuestro alrededor, de reír y de llorar de alegría. Podemos abrazarnos, besarnos, ayudarnos, querernos. Podemos elegir si ver la parte buena o la mala, la cara A o la cara B de la moneda, del mundo, de la sociedad. Por favor, no perdamos la esperanza. 

Puedo prometer y prometo

Prometo decir lo que sienta. Prometo ser más sincera conmigo misma. Prometo no poner excusas. Prometo viajas más. Prometo no guardar ningún sentimiento. Prometo no acostumbrarme nunca, y aquí te incluyo. Prometo preocuparme menos. Prometo disfrutar más. Prometo contar hasta diez antes de decir algo que valga más que mi silencio. Prometo cogerte el teléfono a las cinco de la mañana si lo necesitas. Prometo acostumbrarme a los cambios. Prometo que aprenderé que no siempre se puede estar arriba, que a veces hay que estar abajo. Prometo darte un beso de buenos días, cada día. Prometo no marcharme sin decir “Te quiero”. Prometo ser yo misma en cada momento. Prometo aprender inglés. Prometo buscar en el diccionario cada palabra que desconozca. Prometo cuidarte cuando seas viejito. Prometo reír cada día. Prometo sentir cada kilómetro. Prometo llevar de todo en el bolso. Prometo escuchar más consejos. Prometo no quedarme dormida a mitad de la película. Prometo ir más al cine. Prometo aprender cada día. Prometo taparte cuando no tengas abrigo. Prometo sorprenderme. Prometo sorprenderte. Prometo no dejar de sentir mariposas en el estómago. Prometo un gran viaje. Prometo acompañarte mientras consigues tus sueños. Prometo aprender a decir “no”. Prometo alejarme de lo que no me hace sentir bien. Prometo hacerle frente a esta realidad. Prometo tiempo. PROMETO.

Escribir

Me quería poner a escribir y no me salían las palabras, entonces me he preguntado ¿Por qué escribo? ¿Para quién escribo? os lo voy a contar. 

Escribo porque me me relaja, me aleja de la realidad, me hace ver las cosas con perspectiva, me deja expresarme, escribo porque soy capaz de plasmar mis sentimientos, escribo lo que no soy capaz de decir. Escribo porque cuando lo hago soy yo, no tengo que fingir, ni que quedar bien, no tengo que sonreír mientras lo hago, no tengo que poner buena cara, ni ser agradable si no quiero, no tengo que dar explicaciones, ni esperar mi turno. Escribir es lo único que me permite borrar lo que digo si algo no me gusta y no tener que dejar constancia de ello. Escribo porque las letras fluyen con más facilidad en mis dedos que en mis labios, porque me puedo reír de mi misma. Escribo porque como dijo Isabel Allende "Escribir es como hacer el amor". Porque para hacerlo sólo necesito tener algo que decir, porque escribir me ayuda a sobrevivir. 

Sara    R. <3

Mi lugar en el mundo

Existe un lugar en el mundo en el que estoy realmente gusto. Hablo de un lugar donde la brisa llega de las montañas, donde puedo ser yo. Un lugar que no es nada y lo es todo. Las montañas separan unos pueblos de otros, separan casas, personas, historias, historias diferentes. Y entre todas esas historias y valles estoy yo. Aquí las noches son frías - sobretodo cuando las pasas sola -  pero el cielo, lejos del bullicio de la ciudad, suele estar despejado, nos deja contemplar las estrellas que pueden contarse una a una, puedes hacer tuya la que más te guste. Habló de un rincón con olor a café recién hecho, tarta de queso y tostadas. Un lugar con encanto, una habitación pequeña, llena de vida... el lugar más acogedor en el que hayáis estado, un lugar donde sólo apetece estar abrazado y ver una película. Cuando estoy ahí pienso que si existe un cielo en este mundo, éste, sin duda, es el mío.